Ruta de Año Nuevo: siguiendo las huellas de Jaume I

De Jaume I se dicen muchas cosas, y su figura está rodeada por un aura de leyenda. Sin duda, es un personaje excepcional, y por eso en la Vall d’Albaida han querido homenajear su historia en la comarca con una ruta senderista que retoma su paso de conquista por esta zona de interior. Desde la Finca San Agustín os invitamos a recorrer el inicio del camino, de Bocairent a Ontinyent, como idea para un plan diferente de Año Nuevo, en una versión reducida del sendero. Esta primera etapa de la ruta se convertirá en una excursión sencilla y fácil, sobre todo si vamos con la familia, y además dejará tiempo para parar a comer o merendar en estas localidades después de la caminata y probar la gastronomía de cada sitio.

La conquista del Reino de Valencia por parte de Jaume I comenzó en 1232 con la toma de Morella. El que fue rey de Aragón fue avanzando a partir de entonces por todo el territorio de la Comunitat. Siguiendo sus pasos, comenzamos el recorrido en Bocairent, que fue tomada en 1245 por las tropas del Conqueridor. Su núcleo medieval es muy conocido, de diseño árabe, laberíntico y único en la zona. Empezaremos pues en la Plaza de Sant Blai o en la Plaza de l’Ajuntament, donde encontramos señales que marcan el camino y que nos llevan por las antiguas calles y callejones de origen andalusí, recreando así la época anterior a la conquista de los cristianos. Luego, seguiremos por el ayuntamiento y hasta el Museo Arqueológico, para llegar a la ermita de la Mare de Déu dels Desemparats, cruzando algunas fuentes y lavaderos. Allí, son dignas de ver las ruinas de casas medievales de la calle del Muret. Hay que subir entonces las escaleras para atravesar la plaza de Sant Vicent y ver la escalera de las siete vueltas y la ermita de la Mare de Déu d’Agost. Luego subimos por la calle de Sant Joan, donde encontramos la ermita de Sant Joanet. Desde allí, la Ruta Màgica que cruza Bocairent nos lleva a los pies del pueblo, hasta la cueva del Pou de Sant Vicent, y hasta el puente de la Calçada, desde donde comenzaremos el trayecto hacia Ontinyent, que durará alrededor de tres horas y media.

Nos introducimos así directamente en un viaje al pasado, ya que el camino que hay que seguir es el que se recorría antiguamente entre Bocairent y Ontinyent. Así, saliendo del puente, pasamos la Casas de l’Alfara y llegamos a la fuente d’en Ferris, y tomamos el camino de la derecha cuando lleguemos a una cruz. En la ermita de Sant Antoni de Baix hay que ir a la izquierda y subir a la sierra. Una senda más estrecha y antigua, como salida de un cuento, comenzará a aparecer entonces entre la vegetación, y llegaremos a una bifurcación que hay que seguir hacia la derecha. Pasando la finca de Massarra bajaremos al barranco de la Fos. Este tramo es muy especial por cómo se integra en el paisaje y porque parte de él está excavado en la roca, con una barandilla de roca cerca de la fuente del Rei. Allí cerca hay un refugio rupestre antiguo.

En el siguiente cruce hay que bajar y seguir por el camino de la izquierda, bajando el barranco del Bou. Aquí empezaremos a ver numerosas ruinas de casas abandonadas, como la de Beneito. Llegamos entonces a la fábrica de Pep Joan o de la Roda, con grandes tinas de piedra junto al camino, muestra del pasado industrial del municipio, junto a otras que hay en la ruta, como la fábrica de 1902 que te encuentras en el camino. Aparecerá el canal del molino de Patiràs, donde el camino comienza a hacerse urbano. Entonces encontraremos la font dels Tarongers y ya la carretera de Bocairent-Ontinyent. A través de ella llegamos a un viejo pantano, y después al Pou Clar con su zona arbolada, y tomamos luego la senda de l’Alba para llegar al camino de Llombo.

De esta forma nos encontraremos ya en la zona de las afueras de la vila de Ontinyent, que fue conquistada por las tropas de Jaume I de Aragón en 1244 e incorporada al Reino de Valencia. Veremos bancales y casas de campo hasta llegar a una vieja fábrica, donde iremos a la izquierda hacia el núcleo urbano. Para llegar al centro, hay que tomar la Avenida del Llombo y después la del Comte de Torrefiel. Una vez allí, los numerosos monumentos de la vila y su núcleo urbano, así como su gastronomía, harán las delicias de todo el grupo.

Con este recorrido, habremos visto la tierra de antiguos pueblos musulmanes que dejaron una gran herencia, tierra de batallas y de conquista de la mano de Jaume I. En definitiva, lugares de historia. Además, habremos descubierto paisajes de montaña y de sierra, y paisajes fluviales que moldean todo a su alrededor. Todo ello hará que empecemos el año con un recuerdo que se quedará para siempre en nuestra memoria. ¿A qué esperáis para comenzar a planear vuestra excursión?